La compra de Warner Bros. Discovery por parte de Netflix, valorada en casi USD 83.000 millones, se ha convertido en uno de los movimientos más grandes e inesperados de la industria del entretenimiento. La operación incluye al estudio de cine y televisión de Warner y también a la plataforma de streaming HBO Max, responsable de franquicias icónicas como Game of Thrones, The Last of Us o Harry Potter.

Aunque el anuncio generó una ola de especulaciones, lo cierto es que los usuarios no verán cambios inmediatos en sus cuentas. Netflix ha confirmado que, por el momento, HBO Max seguirá funcionando como un servicio independiente. No habrá una fusión de aplicaciones, catálogos ni suscripciones en el corto plazo.

La compra todavía no se ha cerrado completamente. Antes de que la operación sea oficial, Warner debe separar su división de canales tradicionales, como TNT, TBS o CNN, en una compañía distinta. Ese proceso podría extenderse hasta finales de 2026.

Aunque no habrá una fusión inmediata, Netflix dejó abierta la puerta a posibles planes o paquetes combinados más adelante. Esto significaría que los usuarios podrían acceder al catálogo de HBO desde un plan especial dentro de Netflix, sin tener que manejar dos servicios distintos.

Además, al sumar el catálogo de Warner, Netflix se refuerza como el gigante del streaming: más contenido, más sagas grandes y más poder para competir con Disney, Amazon y Apple.

La noticia sacudió a Wall Street. Las acciones de Netflix cayeron el día del anuncio, mientras que las de Warner subieron notablemente. El movimiento refleja la magnitud del acuerdo y el impacto que tendrá en el futuro del entretenimiento digital.