El lunes 8 de diciembre de 2025, Paramount Skydance sorprendió a la industria al presentar una oferta pública para adquirir la totalidad de Warner Bros. Discovery por USD 108.400 millones en efectivo. Con este movimiento, Paramount busca arrebatar a Netflix, quien recientemente había anunciado un acuerdo para comprar los estudios y servicios de streaming de WBD, el control completo del gigante del entretenimiento.

Paramount ofrece una prima considerable respecto al valor de mercado anterior de WBD, y argumenta que su propuesta es más sólida, transparente y menos dependiente de complejos arreglos financieros. Para ellos, esta oferta en efectivo representa una oportunidad clara para los accionistas, mucho más directa que la de Netflix.

A diferencia del acuerdo de Netflix, que se centraba en los estudios de cine y televisión, y en servicios de streaming como HBO Max, la propuesta de Paramount busca adquirir todo el conglomerado WBD, incluyendo sus canales de cable, redes de televisión y otros negocios lineales. Esto significa una apuesta mucho más ambiciosa: no solo contenido de películas y series, sino también canales tradicionales.

Paramount considera que la oferta de Netflix es “”inferior e incierta””. En su comunicado, la compañía critica la estructura de la operación de Netflix y señala que su propuesta en efectivo aporta más valor de inmediato a los accionistas. Además, Paramount presume de tener un camino regulatorio más factible, lo que podría facilitar y acelerar la transacción.

Asimismo, Paramount busca posicionarse como un jugador integral en la industria del entretenimiento: con estudios, streaming y canales tradicionales, pretende convertirse en un gigante mediático capaz de competir con cualquier plataforma global.

La situación dejó claro que la compra de WBD está lejos de definirse. Aunque Netflix ya había anunciado su acuerdo, la oferta de Paramount reaviva la competencia y complica el panorama. Ahora, los accionistas de WBD podrían tener que decidir entre la oferta de Netflix, que solo incluye parte del negocio o la de Paramount mucho más amplia, pero más compleja.

Además, la posible compra total de WBD por parte de Paramount implica riesgos regulatorios, incertidumbre en cuanto a futuras fusiones o divisiones, y un posible cambio radical en cómo consumimos entretenimiento: canales de cable, streaming, estudios cinematográficos, todo bajo un mismo paraguas.

La oferta de Paramount por USD 108.400 millones representa un nuevo capítulo en la pelea por el dominio del entretenimiento global. No se trata solo de quién controla la librería de películas y series del mundo, sino de qué modelo de consumo dominará los próximos años: streaming puro, televisión tradicional, híbridos, paquetes completos. Lo que está en juego no es menor: el futuro del entretenimiento, tal como lo conocemos. Y aunque la oferta de Netflix parecía firmar el final de la historia, Paramount le acaba de reescribir el guion.